Puede que te sorprenda mi aspecto, porque no me parezco a un recién nacido de los anuncios.
Tengo la cabeza un poco deformada y los párpados hinchados.
Mi cuerpo y mi cara están cubiertos de hematomas que son el resultado de haberme apretado a través de tu canal de parto.
Mis pezones están hinchados como consecuencia de la influencia de las hormonas placentarias y la prolactina.
Puedes notar un suave vello lanugo que cubre mi cuerpo e incluso las orejas.
Hay dos fontanelas en mi cabeza. Son membranas que unen los huesos de mi cráneo.
Soy muy frágil y mi cuerpo es flácido y pequeño.
Desarrollo del bebé en 1 semana
Ya no pareceré un pequeño boxeador. El enrojecimiento y la hinchazón desaparecerán.
Puedes observar cómo está cambiando la forma de mi cabeza. Se está volviendo más redonda en vez de estar alargada.
La mayoría de los recién nacidos experimentan ictericia neonatal. Sus síntomas se desarrollan normalmente al segundo día del nacimiento y alcanza su punto álgido al quinto día.
La ictericia fisiológica no es peligrosa, mamá. No es necesario instaurar un tratamiento de fototerapia si los niveles de bilirrubina no aumentan.
Al segundo o tercer día de vida, puedo perder peso. Es un proceso normal llamado pérdida de peso fisiológica.
Desarrollo del bebé en 2 semanas
El muñón de mi cordón umbilical debería caerse en ese momento.
Ahora paso la mayor parte del tiempo durmiendo. Puedo llegar a dormir hasta 20 horas al día.
Mientras duermo, te sorprenderán los movimientos descoordinados de mis brazos y piernas, así como las sacudidas de los músculos de la cara. Algunos afirman que es el resultado de tener sueños.
Podrías pensar que sólo soy un observador pasivo, pero en realidad proceso todo lo que veo suceder a mi alrededor, aunque sólo pueda ver las cosas de cerca.
La 3ª semana. - ¿Qué ocurre la 3ª semana después del parto?
Llorar es mi único medio de comunicación. Me ayuda a expresar cuando me siento incómodo por un pañal mojado o porque me duele algo, o el hecho de que tengo hambre o necesito dormir.
Dedico el 10% de mi día a estar activo. Cuando tengo los ojos abiertos, puedes hablarme con voz tranquila o tararear melodías.
Me gusta tumbarme boca arriba. Tumbarme boca abajo puede resultarme cansado, pero no te desanimes por mi inquietud e intenta ponerme en esta posición lo más a menudo posible.
En la tercera semana de vida podrás observar cuál va a ser mi temperamento. Los recién nacidos vivaces y ruidosos permanecen activos y los bebés tranquilos permanecerán calmados.
Puedo reconocer tu olor y el sonido de tu voz, y cuando te acerques también podré verte.
Semana 4 - ¿Cómo es el desarrollo de mi bebé en la semana 4?
Mi piel ya no se parece a la de un recién nacido. Es suave, ligera y de color uniforme.
Me enfrío con bastante rapidez. La llamada piel moteada, que tiene un color irregular y a parches, puede ser una señal de que la temperatura de mi cuerpo está bajando.
Ya se oyen ligeros ronroneos u otros ruidos guturales, aparte del llanto.
Ahora abro los puños cada vez más a menudo. Al hacerlo, comunico que estoy dispuesto a explorar el mundo.
Puedo posar mis ojos en tu cara durante un buen rato, pues es la vista más hermosa.